De Freud y otras mamadas

Lo poco que he visto de psicología me ha puesto a pensar en las teorías... algunas pueden ser extremadamente contundentes, precisas, de esas cosas que dan justo donde tenian que darte.
Otras, sin embargo, se pasan de verga (literalmente).

El buen señor Freud se dedicó toda la vida a hacerle creer a un mundo cerrado a la influencia judeo-cristiana basicamente tres cosas:
Todo tiene que ver con tu pene.
Todo tiene que ver con la ausencia de pene (en su caso, damas).
La manera en la que tu madre te dio de comer en los primeros meses de vida y la forma en la que te enseñaron a cagar determina cuantas veces te divorciaras.

El buen señir Skinner. De él los académicos de la unversidad de ratas de experimentos dicen:
"Cada que jalamos la palanca, ese pelón nos da comida". Nunca distinguió una conscienca de una conducta refleja, si no existe tal conscienca sólo el sabe con que instrumentos llegó a esas conclusiones (la conclusión: Estímulo -> ¿? -> Respuesta.

Joder, y vámonos con mamadas tales como los cristales en el agua, recuerden hablarle bien a su agua porque si no, el dia que por alguna casualidad horrenda (que espero que no les ocurra, mis apreciados lectores), se queden varados en algún pais con fríos tremendos, los cristales de agua que se formaran en sus celulas matándolos lenta y agónicamente tendran formas deformes (la redundancia es intencional).

Son sorprendentes las conclusiones a las que un autor puede llegar después de dedicar su vida a observar una misma conducta...

Freud... algo loco, sí, pero una persona muy educada, culta, consciente de sí misma y sobre todo inteligente.
Este señor pasó la mitad de su vida diciendonos que deseamos acostarnos con nuestras madres, en el caso de algunas madres de la farándula, ¿Por qué no hacerle caso?